Un testimonio de la primera línea: “Es sobrecogedor el espíritu y la humanidad dentro de las filas”

¿Quiénes están en la primera línea? ¿Cómo se organizan espontáneamente? ¿Por qué decidió ser primera línea? Todo es y más en el siguiente testimonio.

Rodrigo, un ingeniero de 37 años, llamó al último episodio de #LaVidadelxsOtrxs para contar su testimonio de la primera línea. 

“Estoy sin pega ahora y cuando voy a marchar veo a chicos más chicos que yo, que lo dan todo por defender a otras personas. Tengo 37 años y tengo un hijo de 15 y otro de 3 y me sentí en la obligación de defender a estos cabros. Es sobrecogedor el espíritu de cuerpo y la humanidad dentro de las filas. Es como estar en un ejército espartano”, comentó.

“¿Hay drogas en la primera línea?”, le preguntó la conductora Nicole Senerman, haciendo alusión a diversos comentarios que circulan en redes sociales y a una reciente columna de Mario Waissbluth en El Mostrador.

“En la primera línea no hay tiempo de nada más que de estar atento de los pacos, cuidando al que está al lado tuyo. Esos cabros que están ahí son rechazados por la sociedad, son cabros que no tienen nada que perder”, contestó el Ingeniero. 

Sobre la seguridad propia, el auditor comentó que anda con gafas balísticas, mascarilla y chaleco anti-perdigones. “Ahí vamos a seguir, hasta que tengamos una policía que la gente no le tenga miedo cuando pase cerca de ellos. Una policía que de verdad proteja al más débil, que sea del débil el protector y no el abusador. Lo digo humildemente y esperando no haber ofendido a nadie porque mi abuelo era carabinero”, confesó.

“Es super organizado, cuando ya no se puede avanzar más, hay alguien que grita de repente ‘recambio’ y tu tenís que irte al fondo a resguardarte. Se acerca gente que se acerca, que recibe a los heridos y entra otro batallón de nuevo. Es sobrecogedor”, comentó.

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