Columna de Ja Court: Hasta que volvieron ellas
Después de meses de incertidumbre para la hinchada, la prensa y todo el entorno del fútbol femenino, este fin de semana tuvimos el placer de volver a ver el balón en movimiento.
La ley de profesionalización del fútbol femenino entró en vigencia y si queremos simplificar y resumir la historia, desde mi punto de vista, los clubes necesitaban tener claros los detalles y reglamentos de la nueva ley, para poder invertir lo menos posible y por el menor tiempo posible en sus ramas femeninas.
Si para los clubes no hubiese un sesgo de género y se dieran cuenta que el termino correcto es invertir y no gastar. Si tan solo hubieran comprendido eso, no habrían demorado tanto el definir el sistema de campeonato, así como tampoco en darle inicio al torneo local.
Mientras algunos clubes querían saber si a las jugadoras las tenían que contratar desde marzo o si podía ser “antes de octubre”; había otros intentando que el torneo durara lo menos posible para pagar los sueldos durante menos meses.
¿Acaso alguna vez van a pensar en ellas? ¿Qué tipo de compromiso le vas a pedir a una futbolista que necesita tener un trabajo adicional al de jugadora? Sabían acaso que el arriendo, el supermercado y las cuentas se siguen pagando el año completo. La discusión debiese ser que sistema de campeonato puede aportar al crecimiento de la disciplina. Pero el foco estaba puesto en el sistema de torneo que signifique “menos gastos” para los clubes.
Luego de tanta espera llegó el ansiado día. Volvió el fútbol. Volvieron ellas. Las futbolistas. Eran las más afectadas con la poca información oficial que había al respecto del inicio del torneo y si bien la mayoría de los clubes ya estaba entrenando, para una jugadora nada es como volver a pisar el césped.
Este fin de semana fueron siete los partidos de primera división femenina. El día sábado Iquique vs Audax italiano fueron quienes le dieron inicio al campeonato. Un empate dos a dos terminó con los primeros noventa minutos de fútbol del 2023. Más tarde fue el debut de las piratas en primera, con un triunfo tres a uno de Coquimbo sobre Deportes Antofagasta.
El día domingo se jugaron los cinco partidos restantes. Para hacerle difícil el día a quienes seguimos el torneo completo y no solo a un equipo, se jugaron TODOS a las 11:00hrs.
La UC perdió 2-4 frente al Chago. Las cruzadas que no vieron una el primer tiempo, tuvieron una significativa mejoría en la segunda mitad. Si no fuera porque Fernanda Cárdenas atajó un penal en su debut en el arco de las Bohemias, que era el 3-4 parcial, Universidad Católica tenía todo para complicarle el partido a Santiago Morning.
Palestino tuvo su revancha venciendo 7-0 a Fernandez Vial, que el año pasado había dejado a las baisanas sin play off. El resultado no es más que el reflejo de que todos los aplausos que recibió la dirigencia Aurinegra por el gran proyecto que hicieron con la rama femenina el 2022, no son más que un lindo recuerdo en el equipo de la octava región que comenzó a entrenar recién hace dos semanas y perdió a parte importante de su plantel al no respetar ni cumplir con lo mínimo que pedían las futbolistas.
La U de Conce venció 7-2 a D. Puerto Montt y Camila Gómez, con cuatro tantos es la goleadora del torneo al cierre de esta primera fecha. Universidad de Chile venció de visita a O’higgins seis a cero en Rancagua y Colo Colo, también de forasteras, ganaron ocho cero a Cobresal.
Este fin de semana volvió el fútbol. Fueron ciento cincuenta y cuatro las futbolistas que vivieron de forma íntima esa centésima de segundo mientras suena el pitazo inicial y comienza a correr el balón. Solo ellas saben que pasó por sus mentes, cuerpos o corazón en ese instante. Por fin. Comenzó el campeonato.
Con el pitazo final del partido al que fui, fue como si se detuviera el tiempo por ese momento. Miré al público alentando, a las jugadoras sacándose fotos con las hinchas a través de las rejas y todo el entorno. No tengo el dato exacto de si tienen efectivamente contrato profesional la mitad de las futbolistas que terminaron en cancha. Pero si estamos viviendo una realidad del fútbol jugado por mujeres que no se si muchas de nosotras imaginábamos que podríamos si quiera disfrutar desde la galería.
Ellas son profesionales, están viviendo el sueño. Pero todavía falta mucho para que sea un trabajo digno. La lucha continua y no se acaba hasta que todas las futbolistas y todas las mujeres que trabajamos en torno al fútbol, tengamos el mismo trato y las mismas condiciones. Que el balón siga rodando.
Por Ja Court (@jacourt11)