La Minuta PM: Sebastián Piñera asegura que izquierda "buscó derrocar a un Presidente" durante Estallido Social
Lo que sucedió. El ex mandatario Sebastián Piñera reiteró que su gobierno vivió un “golpe de Estado no tradicional” durante el Estallido Social, durante el cual “el objetivo era derrocar al presidente y debilitar las bases de la democracia”.
En una entrevista con el diario español ABC, Sebastián Piñera volvió a comentar su postura respecto a las manifestaciones de octubre de 2019: “Yo hablé de un intento de golpe de Estado no tradicional porque no tenía nada que ver con los golpes habituales en América Latina (…) hubo una reacción social legítima. Pero también una actitud ambigua ante la violencia y la democracia”, explicó.
“Se generó una ola irracional de violencia criminal que no respetó a nada ni a nadie, donde la consigna era quemarlo todo, cosas tan nobles como escuelas, hospitales, iglesias, el Metro de Santiago”, declaró Piñera. En esa línea, señaló que durante este periodo la izquierda, que en aquel período representaba la oposición, “no tuvo una posición de clara condena de la violencia” y aseguró que “muy por el contrario, fue ambigua, la toleró, la apoyó, la justificó e incluso buscó formas de derrocar a un Presidente que había sido elegido democráticamente”.
El Mandatario también relató que “al día siguiente del 18 de octubre, el líder del Partido Comunista pedía la renuncia del Presidente de la República. El Congreso rindió homenaje a la llamada ‘primera línea’ que eran los activistas que quemaban los bienes públicos y privados, y se presentaron acusaciones constitucionales contra el Presidente”.
Además, apuntó a que “la democracia estuvo en grave riesgo” y comentó que en ocasiones “hubo un riesgo inminente de que tomaran el Palacio de La Moneda que era el objetivo que persiguieron permanentemente durante esos días, junto con quemar otros edificios emblemáticos”.
El enemigo poderoso
Consultado sobre la frase “estamos en guerra contra un enemigo poderoso” que dijo mientras se desarrollaban marchas multitudinarias en todo el país, Piñera aclaró que no era una guerra contra el pueblo de Chile.
Por el contrario, era “contra la violencia criminal, (…) por eso yo siempre distinguí entre las legítimas manifestaciones pacíficas, propias de la democracia, y esa ola de violencia irracional absolutamente condenable”, declaró el ex jefe de Estado.
Respecto de la administración de Gabriel Boric, opinó que “el país va por mal camino, malas ideas, mala gestión, malos resultados. Porque no estamos haciendo frente a los grandes problemas que tiene Chile”.
En ese línea, detalló que estos son "por una parte, la falta de sentido de una misión compartida y eso es una tarea muy importante que un presidente siempre debe tratar de liderar y orientar. Y, en segundo lugar, tenemos graves problemas de seguridad interna. Y el tercer gran problema es el estancamiento económico”.