Jaime Bassa: “Es paradójico legitimar el retorno a la normalidad y al mismo tiempo pensar en suspender un acto electoral en 6 meses más”

En #CaféConNata conversamos con el abogado constitucionalista, quien señala que el Gobierno está aprovechando el Estado de Excepción para adoptar medidas que no podría tomar en un contexto de normalidad.

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Con el coronavirus presente en el territorio nacional, el cronograma electoral fue modificado y con ello el plebiscito constitucional -a celebrarse el pasado 26 de abril- fue postergado para el 25 de octubre de este año. Hoy se vuelve a debatir una eventual reprogramación debido a la pandemia. “Si el Gobierno quiere suspender el plebiscito y nosotros no hacemos nada por evitarlo, se va a suspender”, dice Jaime Bassa, abogado constitucionalista, y agrega que no tiene sentido plantear retomar clases y trabajos “mañana”, y no poder ir a votar en 6 meses más.

El académico de la Universidad de Valparaíso señala que lo anterior está relacionado con que “jurídicamente hay un Estado de Excepción Constitucional que el Gobierno está utilizando para adoptar medidas permanentes que no podría tomar en un contexto de normalidad, aprovechándose del pánico”. Bassa agrega que estas medidas van a tener efectos permanentes, pues el aparato institucional decidió, por ejemplo, enfrentar el problema laboral asociado a la pandemia con fondos de cesantía, de modo tal que en un tiempo más esos fondos estarán vacíos, y cuando las personas que hoy están con su trabajo suspendido sean despedidas en la primavera, no van a tener fondos de cesantía para solventar sus gastos. “Es extender en el tiempo la excepción, cosa de que se vuelva normalidad, que se vuelva la regla general”, asevera. 

En relación al debate constitucional, Bassa dice que la pandemia ha radicalizado la conversación en torno a los derechos de los ciudadanos porque ha hecho más evidente las debilidades estructurales del sistema. “Se ha hecho todavía más evidente que la Constitución tiene que reconocer la vivienda como un derecho, porque hay familias que comparten departamentos de 50 o 60 metros cuadrados, donde viven dos y a veces tres familias, y no tienen la posibilidad de guardar cuarentena”, apunta.

Si bien la situación de excepción por la pandemia ha paralizado el cronograma electoral, “no termina con la reflexión que veníamos haciendo a raíz de la movilización social, solo le pone freno de mano”, señala Jaime Bassa. El constitucionalista hace un llamado a aprovechar la incertidumbre con optimismo. “Llevamos mucho tiempo escuchando que el pueblo no está preparado para el ejercicio de sus derechos democráticos. Yo creo que llegó el momento de entender que la única forma para prepararnos para el ejercicio de los derechos democráticos es ejerciéndolos”, y agregó que lo que viene a continuación depende mucho de la ciudadanía, y que lo que le corresponde ahora es prepararse, estudiar, conversar para enfrentar el desafío que se viene.

La propiedad que al sistema le preocupa no es el derecho a propiedad que una persona tiene sobre su casa de 40 metros. Es la propiedad que tiene el gran propietario sobre las acciones de alguna gran empresa, o de los fundos y de las tierras o del agua. Todos tenemos derecho de propiedad, sí, pero no todos los derechos de propiedad son igual de importantes para el sistema. El ordenamiento constitucional chileno, si bien se preocupa por la propiedad privada, la protege pensando en los intereses de los grandes propietarios
— Jaime Bassa, abogado constitucionalista

Además, se refirió a la crisis de legitimidad que atraviesa el Tribunal Constitucional hoy. Para escuchar eso y más, te dejamos el podcast aquí:

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