Izkia Siches sobre carnet sanitario: “Son iniciativas que no son tontas”
La presidenta del Colegio Médico estuvo en #CaféConNata conversando sobre las medidas adoptadas por el gobierno para combatir la pandemia, y en relación al “carnet de alta”, señaló que a pesar de que no hay evidencia de que alguien que se infecta con coronavirus luego desarrolla inmunidad, la gran mayoría de las enfermedades infecciosas funcionan así.
En el contexto del COVID-19 y el anuncio del Ministerio de Salud sobre el carnet sanitario que el próximo lunes empieza a entregarse a todos los pacientes que “con alta probabilidad ya tuvieron la infección por coronavirus y son inmunes a reinfectarse”, por lo tanto, incapaces de transmitirlo, en #CaféConNata hablamos con Izkia Siches, presidenta del Colegio Médico de Chile.
Sobre esta medida, la presidenta del gremio dijo que a pesar de que no hay evidencia cierta de que alguien que se infecta no se vuelve a enfermar, la gran mayoría de las enfermedades infecciosas funcionan así: uno se enferma y después desarrolla inmunidad. Señaló que pueden parecen medidas extrañas, pero es lo que se está haciendo en el mundo. “En Italia también se propuso un carnet de sanidad, fue criticado por modelos como el inglés, que se basa en que si no hay evidencia entonces no hay que hacerlo, pero en coronavirus no hay evidencia de nada. Lo primero es decir que no tenemos certezas”, enfatizó.
Si bien hay diferentes percepciones sobre el actuar del gobierno, comentó que las medidas que se han ido tomando sí han permitido que los casos se vayan estabilizando, entonces es esperable que el gobierno vaya soltando de a poco las medidas y observando. “Como médicos somos más cautelosos y tenemos temor a que exploten las UCI. Esperaríamos mayor cautela, pero hasta la fecha se han estabilizado los pacientes críticos”, señaló. La presidenta del Colmed agregó que para aquellos que tienen la percepción de que “nos están mintiendo o escondiendo los datos”, hay dos cosas que el gobierno no puede esconder: los pacientes críticos y los fallecidos. “Nos guste o no, quienes están gobernando en este momento obviamente tampoco les sirve que se les incendie la UCI, al contrario, el gobierno quiere aprovechar esta oportunidad para apuntar el gol sin quemar toda la economía, y sin que sea un fracaso desde el punto de vista sanitario”, dijo.
“Hay incertidumbre, nadie les puede asegurar nada de cómo se viene”
Izkia Siches hizo un llamado a la ciudadanía a estar conscientes de que puede ser muy adverso, que no hay economía ni salud mental que soporte estar 8 meses encerrados. Por eso se necesita no solo la colaboración del gobierno sino de las ciudadanas y los ciudadanos, y acostumbrarse al distanciamiento social. “Hay que estar preparados para situaciones adversas. Empezar a entender que eso puede durar más de lo que quisiéramos que durara, y prepararnos para ese escenario”, señaló.
Sobre el fin de la pandemia, dijo que solo se para cuando un porcentaje importante de la población se enfermó, y que eso puede ocurrir de dos formas: o nos enfermamos o nos vacunamos. “Como no tenemos vacuna, la forma es efectivamente que nos vayamos enfermando pero sin colapsar el sistema sanitario”, mencionó Siches. “Lo que pasa es que quienes trabajamos en la red pública y conocemos cómo funciona, sabemos que todos los inviernos colapsa el sistema, entonces estamos asustados de este invierno que viene por delante y nuestra capacidad de respuesta”, agregó.
La última cama
Con el aumento de la capacidad de cupos de hospitalización que planea el gobierno, se espera llegar a tener 214 camas por 100 mil habitantes Y lo que hacen los modelos predictivos es poder definir ese techo de capacidad de camas críticas, y desde ahí ir aplicando y soltando medidas para mantenerse bajo esa capacidad. Sin embargo, el escenario de “la última cama” probablemente llegará.
El criterio para definir quién ingresa a un cupo de cama crítica y quién no, “no pasa por un checklist” dijo la presidenta del Colmed. “Se va definiendo cuáles son las expectativas de vida, se evalúa la condición de salud, qué tan grave está el paciente, porque si ni siquiera el ventilador mecánico le va a ayudar, no tiene sentido hipotecar esa última cama”, señaló Siches. “Lo que hemos dicho en la mesa social es que sí tiene que haber un criterio con mucha claridad, y ese criterio es que no hay privilegiados, ni porque tiene más plata ni porque es amigo de alguien”.
“Desde el presidente de la República hasta alguien que está detenido en una cárcel, si tienen condición de salud similar, tal como ocurre con trasplantes, no puede pesar más uno que el otro (en situación de la última cama)”
“En algunos casos a pesar de que se ponga toda la tecnología y medicina al servicio del paciente, de todas formas termina en un desenlace letal, y eso significa un gasto de energía fútil. El encarnizamiento terapéutico es esto de querer mantener la vida por sobre el bienestar de las personas, y eso es antiético”
Escucha la entrevista completa en el podcast: