Boric y crisis política en Venezuela: ¿líder de la izquierda joven?
El 28 de julio se realizaron unas esperadas elecciones en Venezuela, cuya crisis política y económica ha provocado que miles de ciudadanos decidan abandonar su país natal. En Chile, donde cerca de 2.600 venezolanos tuvieron la posibilidad de votarlas elecciones se vivían con igual emoción: las personas asistían a votar con banderas, cantando por la esperada derrota electoral de Nicolás Maduro.
Excepto que aquello no sucedió. El gobierno de Caracas anunció la reelección del chavista, y la presión por la entrega de transparencia en las elecciones no se hicieron esperar.
En la noche del 28 el Presidente Gabriel Boric escribe en X: “La entrega de los resultados de esta elección trascendental para Venezuela deben ser transparentes, oportunos y reflejar íntegramente la voluntad popular expresada en las urnas. La comunidad internacional de la que nuestro país Chile es parte, no aceptaría otra cosa”.
De esta forma, el Presidente de Chile se convierte en uno de los primeros mandatarios en exigir estándares democráticos en las elecciones. Según Nerea Palma, académica y cientista política de la Universidad Diego Portales, aquello le da “inevitablemente un liderazgo a Chile, representado en el Presidente Boric, como oposición a la dictadura de Maduro”.
Pasadas las 11 pm, la Cancillería chilena comparte una declaración a través sociales donde saludaban al pueblo venezolano por la realización de las esperadas elecciones y manifestaban que el Gobierno de Chile espera que “se respete la voluntad soberana del pueblo para decidir su destino, y que el proceso electoral pueda culminar con total transparencia”.
Al día siguiente, el Consejo Nacional Electoral (CNE) anunció el triunfo de Nicolás Maduro pese a las críticas internacionales y acusaciones de fraude. Según el órgano electoral, con un total del 80% de las mesas escrutadas, el mandatario venezolano obtuvo el 51,2% de los votos, mientras que su opositor, González Urrutia, el 44,2%.
Resultados que, en palabras del jefe de Estado chileno a través de redes sociales, son “difíciles de creer”.
“Desde Chile no reconoceremos ningún resultado que no sea verificable”, expresó Boric, sumándose de esta forma a la demanda de la oposición a Maduro la publicación de las actas del proceso.
Según Cristián Garay, Doctor en Estudios Americanos y académico de la Universidad de Santiago, la actitud del mandatario “ha tenido una actitud bastante firme, en el sentido de privilegiar una carga moral que le ha aplicado frente a Rusia, Israel y al gobierno de Venezuela”.
De esta forma, y citado en medios internaciones, Boric se posiciona como líder en la oposición a Maduro a pesar de ser “un gobierno de izquierda que es que ha sido bien consistente en eso”, explicó a Súbela News Isabel Castillo, miembro de la Red de Politólogas.
Según explica Castillo, la rapidez en la respuesta del mandatario chileno se contrasta con otras de miembros de la izquierda latinoamericana como Gustavo Petro, presidente de Colombia, quien emitió una declaración “muy buena pero muy cuidada” pero que estaba “en un lenguaje que es aceptable para el chavismo”.
De esta forma, y en opinión de Narea Palma, Boric se transforma en “un líder nacional e internacional dentro de su sector”. “Como gobierno de izquierda, ante los resultados de estas elecciones, tienen la responsabilidad de pronunciarse y condenar una dictadura que es, precisamente, de izquierda”, argumentó la académica.
“No ha tenido tapujos para reconocer en Venezuela una dictadura”, explicó la Candidata a Doctora y Magíster en Ciencia Política de la UDP, “lo que sabemos que en su sector es tremendamente sensible”.
Dentro del conglomerado oficialista, el Partido Comunista se distanció inicialmente con rapidez de la posición del Ejecutivo, felicitando a Maduro por agregar seis años en el poder. Con el paso de los días, y ante la crítica del espectro político, ha transformado su posición a una moderada demanda de transparencia.
La diputada Carmen Hertz (PC) respondió con firmeza a las voces críticas, mostrándose confiada en que el régimen de Maduro muestre las actas de escrutinio. “Confío en que se hará, como han pedido los observadores internacionales, incluyendo las Naciones Unidas, la Celac y el Centro Carter”, sostuvo la parlamentaria el martes.
Respecto de la importancia de la relevancia de la voz del mandatario chileno en el desarrollo de la crisis en el país petrolero, tanto Castillo como Palma coinciden en que es más bien simbólico.
“Lo posiciona como líder de esta nueva izquierda más renovada, que no tiene complejos en condenar estos regímenes que violan Derechos Humanos y que son abiertamente dictatoriales”, especifica Isabel Castillo, Doctora por la Universidad de Northwestern.
Mas perfilarse como rostro de la nueva izquierda no permite contrarrestar la relevancia de Boric en el desarrollo de la crisis en Venezuela como lo pueden hacer los presidentes de Brasil y Colombia, Luiz Lula da Silva y Gustavo Petro, respectivamente.
“La dictadura de Maduro no necesariamente va a caer porque Boric haya pedido transparencia”, detalla la Nerea Palma, académica de la UDP.