Confirmado por la ciencia: Los gamers más malos son los más misóginos
Dos científicos se dedicaron a estudiar el vínculo entre hostilidad hacia las jugadoras y el desempeño en videojuegos, finalmente.
Michael Kasumovic y Jeffrey Kuznekoff hipotetizaron que cuando una mujer aparece en un entorno jerárquico masculino, los hombres que peor se desempeñan responden de manera hostil. No solo lo comprobaron con su estudio, sino que además creen así estos hombres intentan minimizar su pérdida de status al sentirse amenazados. Es decir, estos varones al fondo de la pirámide de poder ven el ingreso de las mujeres como una amenaza, y por eso las agreden.
El estudio se titula “Insights into Sexism: Male Status and Performance Moderates Female-Directed Hostile and Amicable Behaviour” y puedes leerlo acá. Para llegar a sus conclusiones decidieron jugar Halo 3 y usar grabaciones de voces femenina y masculina. Estas frases fueron diseñadas para ser inocentes y neutrales, como “me gusta este mapa”, “buen disparo”, “me divertí jugando”, “creo que se fueron hacia allá” y “ese fue un buen juego” (‘I like this map’, ‘nice shot there’, ‘I had fun playing that game’, ‘I think I just saw a couple of them heading this way’, y ‘that was a good game everyone’”).
Luego de emitir esas frases mientras jugaban, los científicos ordenaron las respuestas de los demás jugadores en positivas, negativas y neutras, y lo vincularon al desempeño de cada uno. Este proceso demostró que los gamers que matan menos enemigos y que mueren más, son los que respondieron de forma negativa a la voz femenina. Es decir, los más malos son los más misónigos.
Para los científicos, este hallazgo es relevante debido a la relación entre los videojuegos, los adolescentes y su desempeño en el mundo real. “La idea de que los videojuegos pueden reforzar cierta segregación de género como la norma para muchos adolescentes es problemática, considerando que una parte significativa son gamers”, declararon Kasumovic y Kuznekoff.